Mes de la Herencia del Imigrante: Nancy
Nancy emigró de la República Dominicana con su familia cuando tenía 13 años. Nancy y su familia vivían cómodamente en República Dominicana, pero vinieron a Estados Unidos para estar juntos y aprovechar las oportunidades profesionales ofrecidas a su padre.
Nancy fue colocada en una clase de Aprendices del Idioma Inglés (ELL) con otros niños inmigrantes, excluidos de sus compañeros de habla inglés. Rápidamente aprendió inglés y encontró amigos y comunidad a través del voleibol.
Como una de las pocas inmigrantes en su escuela, Nancy enfrentó un acoso severo. Sus compañeros de clase le decían que regresara a su país y se burlaban de ella todos los días. Tenía miedo de hablar porque asumió que así eran las cosas en su nuevo país y que nadie la escucharía ni le importaría. Un día, después de la escuela, un grupo de compañeros la golpeó tan brutalmente que fue hospitalizada. Ella todavía tiene efectos secundarios del incidente.
Aunque Nancy tuvo un comienzo desafiante en los Estados Unidos, ella aprendió de su experiencia y está determinada a asegurarse de que otros niños no se conviertan en agresores o víctimas de agresores. Estudiar junto a otros inmigrantes de muchos países hizo que fuera importante para ella asegurarse que sus hijos respeten a las personas de diferentes origines. Ella enfatiza a sus hijos la importancia de tratar a las personas con amabilidad y empatía.
Como miembro del Grupo de MAC de Padres por el Autismo en Lawrence, Nancy también se conecta con otras familias inmigrantes y latinx en su comunidad y les ayuda a conocer sus derechos de educación especial y abogar por sus hijos. Está orgullosa de ser parte de un grupo que hace que los inmigrantes se sientan bienvenidos.
Compartir algunas partes de la cultura dominicana con sus hijos ha sido difícil debido a sus discapacidades. Los niños de Nancy tienen sensibilidad a la comida que hace que los sabores y especias de la comida dominicana sean difíciles de disfrutar, pero ella ha encontrado otras formas de celebrar la cultura dominicana. A los hijos de Nancy les encanta escuchar la música dominicana y mirar las fotos que comparten de las hermosas playas y las fiestas en su país de origen.
Nancy espera visitar la República Dominicana con sus hijos algún día y mostrarles en persona la “felicidad” que, según ella, define la cultura dominicana lo que la hace tan hermosa.